Salir de tu zona de confort
Por Ruth Osborn
«El gran amor y los grandes logros,
todos implican grandes riesgos»
(El Dalai Lama)
Cuando estás en tu zona de confort las cosas son familiares, conocidas y ciertas; el estrés y el riesgo se reducen al mínimo y te sientes seguro/a. Al salir de esa zona de confort te arriesgas, ya que te pone en una situación desconocida. No sabes lo que sucederá después, y no estás seguro/a de cómo vas a reaccionar. Puedes experimentar ansiedad o estrés, ya que podrías no obtener el resultado que esperabas… pero por otra parte, ¡puede que sí! Al salir de tu zona de confort estás abriéndote a la posibilidad de desarrollo personal y enriquecimiento de la vida.

De niño/a probablemente asumiste muchos riesgos, a menudo sin darte cuenta de las consecuencias. La edad y la experiencia nos enseñan a ser cautelosos, por lo que evitamos los riesgos, pero cuando dejas de afrontar riesgos tu crecimiento y desarrollo personal se detienen también. La próxima vez que se presente una oportunidad de dar un paso fuera de tu zona de confort, en lugar de descartarla como demasiado arriesgada, pregúntate qué podrías perderte por no dar ese paso? ¿Qué es lo peor que puede pasar?
«Es imposible», dijo el orgullo.
«Es arriesgado», dijo la experiencia.
«No tiene sentido», dijo la razón.
«Dale una oportunidad», susurró el corazón.
(Anónimo)
A menudo, lo peor que puede suceder cuando se intenta algo nuevo es que es posible que no logres el resultado deseado. La manera de superar este obstáculo para tu crecimiento es simplemente soltar tu apego al resultado. Sigue adelante y haz lo que sea que quieres hacer, y acepta que el resultado será lo que será. A veces las cosas salen como desearías, y otras veces no… así es la vida. Pase lo que pase, recuerda que el desarrollo personal que obtendrás de la experiencia es valiosísima.
«Quien nunca ha cometido un error
nunca ha intentado nada nuevo»
(Albert Einstein)
Cada vez que asumes un riesgo significa que has tenido la confianza y el coraje suficientes para salir de tu zona de confort, así que felicítate por probar algo diferente. Probablemente aprenderás que no era tan temible como pensabas que podría ser, y cuantos más riesgos afrontes, más fácil se vuelve. Con una mayor conciencia aprenderás cómo reaccionas ante situaciones estresantes desconocidas, y a manejar mejor tus reacciones. Podrías encontrarte fácilmente haciendo frente a situaciones que antes eran estresantes, y que tales situaciones han pasado a formar parte de tu nueva zona de confort ampliada. Es probable que aumente tu confianza; cosas que antes parecían imposibles se harán posibles; tu coraje para intentar cosas nuevas será mayor. Con la práctica es posible que aprendas a abrazar el riesgo, realizar cambios y enfrentar los temores. Dentro de tu zona de confort ampliada te sentirás más a gusto con el riesgo y lo desconocido.
Al salir regularmente fuera de tu zona de confort estarás mejor equipado/a para manejar y hacer frente a las incertidumbres de la vida. Te abrirá a oportunidades para una mayor satisfacción, experiencias más enriquecedoras y un conocimiento más profundo de la vida. Algunas de las lecciones más valiosas que puedes aprender provienen de asumir riesgos, ir en pos de tus sueños y salir fuera de tu zona de confort. Acepta no saber, abraza la aventura, acoge el crecimiento en tu interior. Sé valiente, corre riesgos, haz las cosas que te asustan, y te darás cuenta de que no eran tan aterradoras después de todo. •