EDICIÓN: Diciembre 2012 - Febrero 2013

¿Humedades en casa, qué hacer?

Texto: Christine Lendt
Con la llegada del invierno en Ibiza, también vuelve la preocupación de muchos propietarios de viviendas por las humedades que causan daños en la estructura del edificio, dejan marcas antiestéticas y, además, pueden perjudicar la salud con dolores reumáticos o, en caso de moho en las paredes, alergias y enfermedades de las vías respiratorias. Las casas viejas suelen estar especialmente afectadas.... Pero la humedad también puede aparecer en construcciones nuevas, ya que está causada por múltiples factores.





La humedad ascendente

En casas de construcción antigua, la humedad ascendente es un problema frecuente. Aparece cuando la humedad del suelo se filtra en los muros ya que la mayoría de los materiales de construcción contienen minúsculas porosidades. Estos poros absorben literalmente el agua desde el fondo, saturándose de agua las paredes, al igual que el petróleo asciende por la mecha de las lámparas. El grado de la infiltración depende del tamaño de los poros de la mampostería, de la calidad de la pintura y, también, del grado de humedad en el suelo. La altura máxima suele estar en 1.50 m. Estas humedades son las responsables de las paredes frías, de los desprendimientos del revoque y del enlucido y de la creación de los perniciosos mohos.











Cuando hay goteras en casa

Otro desencadenante para la humedad es sencillamente la lluvia. Si el revestimiento está defectuoso, penetra directamente en la mampostería. A menudo los aleros no son suficientes. El agua también puede penetrar a través de desagües defectuosos y tuberías rotas. Los revestimientos exteriores que están en contacto directo con el suelo, también absorben y se impregnan con sales y humedades. En Ibiza, los tejados planos siempre presentan problemas, puesto que las aguas pluviales quedan estancadas y se acumulan. Si, además, no se ha impermeabilizado el techo, las cosas van de mal en peor. Los expertos recomiendan impermeabilizar el tejado con caucho, como medida preventiva. Sin embargo, Vd. también podrá contribuir a evitar las goteras: controle y limpie regularmente los desagües del tejado – a menudo cubiertos por las hojas de los pinos.
















Tanto en el tejado, como en las paredes, las ventanas o bien en las instalaciones: Los daños más insignificantes pueden tener consecuencias graves, pues la gota de agua horada la piedra: con el tiempo aumenta la cantidad de agua que se filtra incluso en grietas minúsculas, juntas permeables o pinturas exteriores defectuosas. Para evitarlo Vd. podrá tomar medidas preventivas inspeccionando regularmente su casa e impermeabilizando las posibles fuentes de los males. Una pintura exterior con un producto especial también podrá evitar la filtración de humedad. En una obra nueva deberían utilizarse ya de entrada materiales aislantes.




Agua de condensación en el salón

El agua de condensación se forma cuando el aire caliente y húmedo entra en contacto con una superficie más fría. La humedad del aire se condensa y se precipita, como el rocío en el campo. Solamente que en una casa esto resulta menos romántico. En las últimas décadas, los daños causados por condensación han aumentado de forma considerable. La causa es que el agua de condensación suele aparecer después de unas obras de reforma.









Las ventanas viejas y permeables, por ejemplo, proporcionan una salida suficiente del vapor del agua. Después de instalar ventanas nuevas, la humedad ya no puede salir de la habitación. En este caso debería airear bastante más, sobre todo después de ducharse o de cocinar. Y otro truco más: Siempre que pueda ponga la colada a secar al aire libre o en la secadora, ya que la ropa húmeda dentro de la casa también es una fuente importante de humedad por condensación.






Consejos de expertos

Para establecer un diagnóstico exacto de la humedad en una vivienda, es aconsejable acudir a un técnico competente que, en base al análisis, podrá asesorarle sobre las medidas a tomar. Pero Vd. mismo también podrá contribuir a la prevención, por ejemplo instalando deshumidificadores eléctricos. Es muy importante airear y aclimatar correcta-mente.

La “ventilación de choque“ es de probada eficacia: abra todas las ventanas de par en par, varias veces al día, durante unos cinco o diez minutos. La corriente facilita el rápido intercambio del aire interior húmedo y caliente con el aire exterior sin que el mobiliario y las paredes se enfríen demasiado.

En cuanto a la calefacción, será exactamente lo contrario:










Es mejor calentar de forma continua a temperaturas bajas en vez de poner la calefacción al máximo durante poco tiempo, pues quien apaga la calefacción durante el día cuando está ausente, encontrará una casa fría al volver a casa por la noche. Si entonces se pone la calefacción a tope, se calienta solamente el aire, mientras que las paredes continúan frías, provocando luego la condensación de la humedad acumulada en la habitación, que es precisamente lo que pretendía evitarse.